¡No queremos militares en nuestras calles, ni en nuestras plazas!
Denunciamos la participación militar en un acto religioso el pasado viernes 2 de febrero. Una procesión en la que se recorrían las calles del casco de Ingenio con la patrona del municipio «custodiada» por militares y sus armas.
Denunciamos que las guerras empiezan aquí, promoviendo la militarización social cuando el ejército participa en actos religiosos, ocupando un espacio, que es de todas, para normalizar y maquillar las violencias que ejercen, legitimando así las guerras y la muerte.
Hasta donde nosotras conocemos la religión cristiana habla de amor y de paz ¿como es posible que en una procesión se permita la presencia de militares armados? ¿Qué sentido tiene? ¿Qué objetivo? ¿Que necesidad?
Nos informan que es la primera vez que participan en esta procesión, ojalá sea la última.
¡No queremos ni una más!
Deseamos un municipio que promueva una cultura de paz y noviolencia, sin militares en nuestro territorio, ni juras de banderas civiles en nuestras plazas, ni visitas a los centros escolares para hablar de «misiones de paz» ni gastadores del ejército del aire para «proteger» a la patrona del municipio en una procesión…
¡Ni una vez más!